La Escuela de Hostelería de la Cónsula
La Escuela de Hostelería de la Cónsula se forma sobre los quesos artesanos andaluces. El proyecto Patrimonio Quesero Andaluz inicia un periodo de jornadas formativas con las escuelas de hostelería.
Llevar los quesos artesanos andaluces a los mejores fogones de la cocina andaluza y sensibilizar al sector hostelero acerca de la buena calidad y variedad de los quesos artesanos andaluces. Con este objetivo, Patrimonio Quesero Andaluz, en colaboración con la Escuela de Hostelería de La Cónsula, ha organizado una jornada formativa sobre los quesos artesanos andaluces.
Esta jornada formativa es la primera de una serie que inicia Patrimonio Quesero Andaluz con las escuelas de hostelería de toda Andalucía, con el objetivo de poner en valor los quesos artesanos andaluces a través del conocimiento de su sabor, olor, textura y apariencia.
Proyecto patrimonio quesero
Andalucía es la región española con mayor variedad de quesos artesanales, teniendo catalogados por la Unión Europea un total de diez quesos artesanales puros de cabra y cinco puros de oveja. Sin embargo, y a pesar de esta gran representatividad, estas variedades de queso no poseen ningún distintivo de calidad que los ampare en los mercados extranjeros. Basándose en estos dos hechos, principalmente, una docena de grupos de desarrollo andaluces coordinados por el Grupo de Desarrollo Rural Valle del Guadalhorce pusieron en marcha la acción conjunta de cooperación Patrimonio quesero andaluz, un proyecto que pretende poner en valor los quesos artesanales andaluces y todo el acervo cultural que lo rodean.
El objetivo principal del proyecto es la puesta en valor de los quesos artesanales de Andalucía, que son fruto de nuestro clima, nuestro suelo, nuestro entorno y, por supuesto, de las especiales características de las razas autóctonas andaluzas (payoya, malagueña, blanca serrana, florida, merina de Grazalema…) y cuya forma de elaboración y conservación suponen un acervo cultural transmitido de generación en generación hasta nuestros días y que ha permitido la conservación de un importante patrimonio cultural, etnográfico y gastronómico, generados de riqueza y desarrollo en las zonas rurales.
