El ´trabajador´ más joven del PTA es un malagueño de siete años de edad que se encarga de poner nombre a los productos que fabrica su tío.
Dicen que la creatividad, al menos la buena, no tiene porqué tener edad, y así lo ha demostrado un malagueño de siete años, que se ha convertido en el creador de los nombres de varios productos que fabrica la empresa de un familiar, tarea que desarrolla desde hace dos años de forma desinteresada, aunque el éxito de la comercialización ha llevado al gerente de la compañía a reservarle unas acciones para cuando sea mayor.
´Ultrapack´ o ´Ultrago´ son algunos de los nombres de los artículos que ha bautizado Jesús Antona, quien dice inspirase mientras se come un helado o ve dibujos animados como los que ven los críos de su edad, pero que él ha sacado un provecho añadido. Este niño prodigio, además de ser un apasionado del fútbol, dedica parte de su tiempo a buscar nombres a las sofisticadas cerraduras para el control de accesos con tarjetas inteligentes de proximidad que produce la empresa de su tío situada en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), con sede en Málaga.
Frente a un helado. «Yo le enseño a mi sobrino lo que hemos creado, le explico para lo que sirve, su forma, y él se pone a pensar cómo llamarlo mientras nos tomamos algo en la heladería del barrio o almorzamos con la familia», explicó su tío, Diego Antona.
Según señaló, la primera vez que le preguntó a su sobrino lo hizo «un poco en broma», pero al ver que los nombres de los productos tenían salida en el mercado empezó a tomárselo más en serio. La gente se acuerda del nombre, «no se queda pensando en cómo se llamaba, sino que se le queda», no hay confusión, «son nombres rotundos que se graban en la memoria», afirmó Diego Antona en una entrevista.
Creaciones como ´Geometrika DEO´, que recibe este nombre porque la cerradura tiene figura geométrica y se abre con el dedo, demuestran como, a veces, la «lógica aplastante» de los niños puede servir de inspiración para los empresarios más curtidos en el terreno.
Un niño alegre. Según lo describe su padre, Jesús es un niño feliz, alegre y despierto, que compagina su faceta de «inventor» con las clases en el colegio y afirma lo que mejor se le da es Conocimiento del Medio.
Pero no es de extrañar que este joven talento haya creado ya seis marcas de productos, teniendo en cuenta la influencia que ha recibido de algunos familiares como su abuelo paterno, un pintor vocacional que ha sabido transmitir su creatividad a las siguientes generaciones.
A diferencia de otros niños de su edad, Jesús combina sus aficiones por el deporte y las manualidades con un trabajo creativo no remunerado que le ha hecho interesarse, a su temprana edad, por el mundo empresarial, y tener claro que en el futuro quiere trabajar en Kalysis, la compañía de su tío con la que contribuye desde hace tiempo.
Kalysis es un grupo multinacional de empresas tecnológicas especializadas en identidad y pago electrónico, en seguridad y sistemas de acceso, y en dispositivos de lectura de tarjetas y sus aplicaciones.
Fuente: www.laopiniondemalaga.es