La situación del sistema de riego de las huertas del Valle del Guadalhorce es preocupante, pero necesita algo más que la renovación de las redes de regadío. Aunque ya hay proyectos en marcha para la modernización de las canalizaciones que, en la actualidad pierden sobre un 50 por ciento del agua debido a su estado de deterioro, los trabajos avanzan muy lentamente y existe cierta desidia por parte de los regantes entre los que ya hay pocos productores, ya que la mayoría de las fincas donde tiene que llegar el riego son pequeñas huertas en las que sus propietarios cultivan para su consumo o entretenimiento y los que verdaderamente se dedican a las grandes producciones agrícolas se abastecen de sus propios pozos, que este año disponen de niveles freáticos más altos, debido a la abundante lluvia del pasado invierno. La mayoría de los regantes están de acuerdo con la modernización del sistema de regadío que convertirá las antiguas acequias en redes por goteo, «pero también hay que tener en cuenta que esta renovación afectará negativamente al ecosistema por donde el agua discurre en su cauce natural», reconoce el alcalde del agua de Coín, Juan Marmolejo.
Desde el punto de vista de este experto, es también necesaria una buena organización en el sistema de riego del Guadalhorce a la par que la reforma de las antiguas canalizaciones. «Lo que no puede ser es que no haya una responsabilidad para contabilizar los tiempos de los que dispone cada regante de agua y las direcciones que debe seguir el suministro para que llegue adecuadamente y de la forma más provechosa a todas las huertas», explica.
Aun así, el riego de las fincas durante este verano está garantizado, ya que después de cinco años de sequía, la lluvia del pasado invierno ha permitido que tanto embalses como manantiales dispongan de agua suficiente para salvar la temporada, aunque siempre con riegos contados.
Mientras tanto, se espera que comience a desarrollarse los proyectos de modernización del sistema de regadío aprobados por las administraciones. La comarca recibirá doce millones de euros para la mejora y reparación de sus canales de riego.
Asimismo, las obras incluyen la sustitución de las acequias de las comunidades de regantes de Los Llanos, Molino Alcuña-Ribera y Barullo por nuevas tuberías cubiertas, lo que beneficiará a unos 20.000 regantes de la zona que esperan la ejecución de este plan.
Fuente: www.laopiniondemalaga.es
