Queserias artesanales una salida a la crisis para los ganaderos

Málaga cuenta ya con unas 15 queserías artesanales en las que fabrican sus productos con la leche de sus propias ganaderías por los malos precios del mercado

El propietario de la quesería La Hortelana de Coín revisa una de sus últimas partidas de queso.
El precio casi por el suelo de la leche en el mercado y la crisis generalizada que sufre el sector ganadero ha obligado a muchos a reinventarse y a buscar una salida a la situación, que ya ha llevado a muchos a echar el cierre. La elaboración de queso artesano con su propia leche es la alternativa que está permitiendo salir a flote a unas 15 ganaderías en un mercado cada vez más emergente en la provincia de Málaga. La quesería El Arquillo de Campillos es un ejemplo. La situación económica de hace casi cinco años ya hacía presagiar que las cosas irían a peor y el propietario de la ganadería de ovejas decidió dar el salto a la agroindustria. “Cambiamos las ovejas de carne que teníamos por otras de leche y en cuanto vimos que había un nicho de mercado en el queso de cabra empezamos nuestra nueva andadura”, explicó el gerente del sector de quesos y ganadería de esta empresa, Juan Francisco Sánchez.

Hoy en día cuentan con unas 2.000 cabras y apenas 200 ovejas, cuya leche utilizan para fabricar un queso de mezcla que el año pasado les hizo ganadores del premio internacional Cincho de Oro que otorga la Junta de Castilla y León, uno de los certámenes queseros más importantes del mundo.

El secreto está, según el responsable de la quesería, “en el carácter artesano de los quesos al fabricarlos con la leche de nuestra ganadería a la que cuidamos perfectamente su alimentación”.

Su apuesta por la agroindustria fue “un acierto enorme”, apuntó. En menos de cinco años, esta quesería artesanal ha conseguido tener una producción anual de alrededor de medio millón de litros de leche y unos 110.000 kilos de queso. Su principal mercado se concentra en la provincia, aunque un tercio ya se comercializa en el resto de España.

También José Urbaneja, dueño de la quesería La Hortelana de Coín, apostó por esta nueva forma de negocio en 2005 cuando la leche se vendía demasiado barata a las grandes lecheras. “No me salían las cuentas y me comentaron esta posibilidad y no me arrepiento, aunque como ha coincido con la crisis aún no hemos conseguido subir mucho”, señaló.

Pero aún así, los mil litros diarios de leche que producen sus 1.500 cabras le garantizan una producción de 200 kilos de queso cada día que tienen en la provincia su principal mercado.

La ventaja de esta apuesta por la agroindustria es, según el secretario general de Asaja en Málaga, Carlos Bláquez, que “los ganaderos no tienen que estar pendientes de las fluctuaciones a las que están sometidos los precios de la leche en el mercado donde no hay más remedio que venderla”.

Aunque esta nueva manera de darle salid a la leche de la provincia permite también la creación de empleo en un sector donde no es tan frecuente. Antonio Vera y su mujer decidieron montar una quesería en 1998 y hoy en día ya cuentan con ocho empleados. Al ser un proceso de fabricación artesana la mano de obra que se necesita es “mucha y ese es otro de los valores añadidos que tiene este sector”, aseguró el dueño de la quesería el Pasto del Valle de Alhaurín el Grande, que produce 180 kilos de quesos al día.

Fuente:.malagahoy.es

Autor entrada: Redaccion

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